Con un polémico gol de penal en el segundo tiempo, ejecutado por Anselmo, Quilmes ganó uno a cero como local frente de Ferro y se clasificó como finalista del campeonato del Nacional B. Deberá enfrentar el martes a Barracas Central en un estadio neutral. El que gane de los dos será quien ascienda a primera junto a Tigre. El Estadio Centenario estuvo al tope y fue una verdadera fiesta.
Quilmes estuvo más cerca, fue el que tuvo más oportunidades pero la suerte estuvo de su lado cuando el arbitro Nicolás Lamolina le cobró un penal que no fue. Anselmo recibió la pelota dentro del área, enfrentó al arquero Miño y el arbitro cobró penal.
Las imágenes de la repetición de la jugada demuestran que no fue penal y que por el contrario, fue el delantero quien le cometió falta al arquero pero el arbitro estaba lejos de la jugada y cobró la pena máxima a favor del cervecero. La ejecución de Anselmo fue perfecta.
En los últimos minutos del encuentro y finalizado el mismo, mientras la parcialidad cervecera festejaba, los jugadores de Ferro se fueron encima del arbitro, quien debió ser protegido y custodiado por la Policía.
Martes decisivo
El próximo martes a las 20,15 el cervecero deberá enfrentar Barracas Central, el equipo del presidente de la AFA, Claudio "Chiqui"Tapia. Será en un estadio de la zona sur del Gran Buenos Aires. Quien gane en ese partido ascenderá a la primera A junto a Tigre.
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