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| Hay controles para que nadie salga ni ingrese |
La decisión fue tomada entre los gobiernos de Nación, Provincia y los municipios de Quilmes y Avellaneda. Ninguna persona podrá ingresar y salir del barrio y se les brindará lo que necesiten. Se dispuso el aislamiento comunitario estricto por el término de 15 días. Pasado ese período Habrá una evaluación sobre los resultados del aislamiento. Hoy se considera contacto estrecho a todo el barrio. "El barrio está cerrado por las fuerzas de seguridad entre las calles Lincoln, Ramón Franco, acceso sudeste y Sargento Cabral. Nadie puede salir salvo criterio sanitario", detalla un informe.
la información oficial señala que "la Cantidad de agentes de distintas fuerzas en el barrio es de 300; 100 por cada turno. "A cada vecino y vecina se les va asegurar comida, elementos de limpieza, desinfección e higiene personal. Se va relevar que necesidades tienen para evitar que salgan (ej. Alimentos para celíacos, remedios, etc)".
Módulos de salud
El comunicado agrega que "Se van a instalar dos módulos del Ministerio de Salud de la Nación dentro del barrio. Todos los casos confirmados, con síntomas leves, van a un centro de aislamiento (Ej. UNQUI). Si no tiene síntomas leves van al Hospital. El objetivo es que aquellos que presentan síntomas parecidos al COVID no sigan en el barrio.
Buena predisposición vecinal
La Municipalidad de Quilmes destacó la "buena predisposición de los vecinos y de las vecinas. Para la organización de todo este trabajo, se está articulando con los referentes del barrio. Se tomó la decisión de dividir por zona, y se camina el barrio con cada referente y una cantidad de promotores de salud. (Total. 50 promotores de salud).
El operativo de salud consiste en identificar casos sintomáticos, si es que tienen algún síntoma. Aquellos que están con síntomas se testean. Mientras tanto lo que se lleva a cabo es la prevención comunitaria.
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